El sol es un generador de energía natural por excelencia; sin embargo, la fabricación de paneles solares que absorban sus rayos, así como otros ingeniosos inventos para aprovechar sus beneficios transformándolos en electricidad, resulta sumamente cara.
Empero existen alternativas para fabricar estos artefactos, como hornos solares, en una escala menor y que pueden ser de utilidad en la casa o como un ejercicio científico para mostrar a los más pequeños.
Y es que, los científicos afirman que para contribuir a mitigar el calentamiento global, es necesario comenzar a utilizar fuentes de energía alternas a las convencionales, como el petróleo, que contaminan fuertemente al medio ambiente.
Gracias a diversos procesos, la energía solar se puede transformar en otra forma de energía útil para la actividad humana: en calor, en energía eléctrica o en biomasa, además no contamina.
PANEL CASERO
Hoy en día en la web circulan cientos de experimentos para acercarse a la energía solar, entonces resulta sencillo hacerse de un panel que fácilmente nos ayude a calentar agua para prepararse una bebida caliente, utilizando solamente una caja de cartón grueso, una botella de plástico de 1,5 o 2 litros, papel de aluminio, papel celofán y pintura negra.
El procedimiento es rápido y no muy laborioso, primero es necesario limpiar muy bien la botella para pintarla exteriormente de negro; posteriormente se coloca a la caja de cartón grueso paredes oblicuas de forma que al apoyar la botella en el fondo quede prácticamente inmovilizada.
El fondo de la caja debe ser forrada, así como sus laterales internos, con el papel aluminio que hay que pegar con la cinta adhesiva, adicional a esto, antes de taparla y colocarla dentro, la botella será llenada hasta sus ¾ partes y comprimida para que el agua llegue al tope.
Finalmente, se cubre toda la botella con papel de celofán y se pega con cualquier cinta adhesiva; la caja queda orientada hacia el norte e inclinada 45º respecto al suelo, para aprovechar así mucho mejor los rayos solares.
En algunas horas (aproximadamente entre 2 a 5 horas), el agua estará caliente.
HORNO SOLAR
La cocina u horno solar, es un invento que bien puede beneficiar a quienes no cuentan con los recursos suficientes para hacerse de una estufa, su gran ventaja es que, aunque no calienta más allá de 150 grados centígrados, no utiliza hidrocarburos y por lo tanto es amigable con el medio ambiente.
Este horno funciona de manera similar que un horno convencional, sólo que es necesario que incidan sobre él los rayos solares para alcanzar temperaturas altas. Los tiempos de cocción son mayores (comúnmente el doble que en un horno convencional). También se puede utilizar como una cesta aislante, en dónde se mantienen los alimentos calientes. Y como aprovecha tanto la luz directa como indirecta el periodo de orientación puede variar según la temperatura que se desee.
Fuente: Diario de Ecología
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